Norman Foster será el encargado de diseñar el nuevo complejo de arte liderado por el bailarín cubano Carlos Acosta. El bailarín ha sido parte del Ballet Real de Inglaterra desde 1998, quien ha escogido como espacio para su nueva escuela de ballet un antiguo edificio abandonado a las afueras de La Habana, en Cuba.
Se trata de un edificio en ruinas que tenía como objetivo ser una de las cuatro escuelas nacionales de arte en la Cuba de Fidel, sin embargo la construcción nunca se completó. El arquitecto re-desarrollará el proyecto original, incluyendo sus cubiertas tipo cúpulas diseñadas por el italiano Vittorio Garatti.
Sin duda se trata de un proyecto de rescate de una joya de principios de la arquitectura moderna, a lo cual foster se ha referido de la siguiente manera: ”Carlos es una gran bailarín que está inspirando la regeneración de una ruina ícono de principios del modernismo en las afueras de La Habana”